Colón
no tenía la intención de demostrar que la tierra era redonda.
En
el siglo VI a.C. Pitágoras dedujo que el mundo era redondo y dos
siglos más tarde Aristóteles lo respaldó con sus observaciones
astronómicas. En 1492, la gente más instruida sabía que el planeta
no era plano
Colón
no fue el primer europeo en cruzar el Atlántico.
Ese
honor lo tienen los vikingos de Leif Eriksson, que llegaron a la
actual Terranova alrededor del año 1000, casi cinco siglos antes de
que Colón iniciase sus viajes.
Tres
países se negaron a respaldar el viaje de Colón.
Durante
casi una década Colón presionó a las monarquías europeas para que
le financiasen su búsqueda de una ruta hacia Asia occidental.
Portugal, Inglaterra y Francia siempre se negaron. Colón subestimó
la circunferencia de la Tierra y el tamaño de los océanos. Por
suerte para él, se topó con el continente desconocido.
La
Niña y la Pinta no eran los nombres reales de dos de los tres barcos
de Colón. "la
Pinta" realmente significaba "la pintada", y la Santa
Clara fue apodada "la Niña" en honor a su patrón, llamado
Juan Niño. La Santa María fue apodada "la Gallega", por
haberse construido en Galicia.
La
Santa María naufragó el histórico viaje de Colón.
En
la Nochebuena de 1492 la Santa María encalló en un arrecife de
coral en la costa norte de La Española.
Ninguno de los tripulantes fue allado con vida.
Colón
hizo cuatro viajes al Nuevo Mundo.
Sus
viajes lo llevaron a las islas del Caribe, América del Sur y América
Central.
Colón
regresó a España encadenado en 1500. El
gobierno de Colón en La Española parece que fue brutal y tiránico.
A los isleños nativos que no reunían suficiente oro se les cort
aban las manos y los colonos rebeldes españoles eran ejecutados en la horca. Aunque Colón fue despojado de su cargo de gobernador, el rey Fernando no sólo lo deja en libertad, sino que le financia un cuarto viaje.
Un
eclipse lunar puede haber salvado Colón. En
febrero de 1504 un desesperado Colón quedó varado en Jamaica.
Abandonado por su tripulación, los isleños se negaban a darle
comida. Sabiendo por su almanaque que un eclipse lunar iba a tener
lugar el 29 de ese mismo mes, el almirante advirtió a los isleños
que su dios estaba enojado con ellos por no proporcionarle alimentos,
y que la luna "se levantaría inflamada de ira". La noche
del eclipse la luna se oscureció y adquirió un tono rojizo, y los
isleños aterrorizados se pusieron a disposición de Colón y le
suplicaron que abogara por la misericordia divina.
Después
de muerto, Colón siguió cruzando el Atlántico. Después
de su muerte en 1506, Colón fue enterrado en Valladolid, España, y
luego su cadáver se trasladó a Sevilla.
Los
herederos de Colón y la monarquía española estuvieron en litigio
hasta 1790. La
mayoría de los pleitos colombinos fueron resueltos en 1536, pero el
proceso judicial se prolongó hasta casi 300 años después del
famoso viaje de Colón.